SEXO, AMOR, SECRETOS… Y LA AGUDA MIRADA DE MORIARTY

Liane Moriarty ha demostrado en sus novelas tener una mirada inteligente y muy penetrante para observar y diagnosticar problemas de nuestra sociedad, dotar de una excelente psicología a sus personajes y meter el dedo en la llaga de la forma más elegante. Y en Nueve perfectos desconocidos vuelve a lograrlo con una historia de destinos cruzados en la que los secretos de los protagonistas se van desvelando a medida que crece la tensión con la potencia y precisión de un mecanismo perfecto. El sufrimiento de muchas mujeres por culpa de una educación que parece haberlas obligado a estar siempre guapas y a mantenerse jóvenes y en segunda fila, el miedo por mostrar nuestros verdaderos sentimientos, la competitividad en una sociedad donde el éxito es el valor supremo, el estrés generado por llevar una vida que en un momento dado se torció y nos dejó perdidos en la cuneta son solo algunos de los dilemas en los que nos veremos envueltos a lo largo de una lectura que, con todo, resulta de lo más divertida. «El mundo había empezado a moverse cada vez más rápido durante la última década. La gente hablaba más rápido, conducía más rápido, caminaba más rápido. Todo el mundo tenía prisa. Todo el mundo estaba ocupado. Todos exigían su gratificación al instante.» Moriarty usa su propia experiencia como escritora para retratar con una mirada especialmente ácida e irónica a su protagonista, Frances, un personaje tierno, cómico e inolvidable, y para diseccionar los nuevos tiempos que corren para la literatura. «Luego Ashlee había pasado a decirle a Frances que su siguiente libro debía tener más sexo, mucho más sexo, pero… ¡sabía que Frances podría hacerlo! Ashlee estaba segura de que Frances ya estaba al tanto de que el mercado estaba cambiando y “si miras esta gráfica de aquí, Frances…, no, esta; eso es…, verás que tus ventas han ido teniendo una especie de…, en fin lamento decirlo, pero se puede afirmar que esto es una tendencia a la baja y necesitamos darle la vuelta en plan superrápido. Ah, y otra cosa más…”. Ashlee había parecido incómoda, como si fuese a sacar a colación un embarazoso problema médico. “Tu presencia en las redes sociales. Me han dicho que no eres muy aficionada a ellas. ¡Tampoco lo es mi madre! Pero es casi esencial en el mercado actual. Tus seguidoras tienen verdadera necesidad de verte en Twitter, Instagram y Facebook. Ese es el mínimo indispensable. Además, nos encantaría que pusieras en marcha un blog y un boletín y quizá algún videoblog con cierta asiduidad. ¡Eso sería de lo más divertido!” Ese retiro voluntario elegido por los protagonistas, en el que se apartan del mundo e incluso se les obliga al silencio y a trabajar unidos, nos lleva a pensar en la realidad actual. En tiempos de confinamiento, hay pasajes de Nueve perfectos desconocidos que parecen estar hablándonos directamente a los lectores. ¿Y si también nosotros podemos salir renovados de nuestro propio aislamiento? «Sé que para alguno de vosotros este tiempo de silencio puede ser un desafío especial. Sé también que el silencio era algo inesperado. Alguno de vosotros puede estar experimentando sentimientos de frustración y rabia en este momento. Puede que estéis pensando: ¡Yo no he venido para esto! Lo entiendo y os digo: aquellos para quienes el silencio sea de lo más difícil, verán también que es de lo más gratificante (…) Ahora mismo estáis a los pies de una montaña. Y la cima parece increíblemente lejana, pero yo estoy aquí para ayudaros a alcanzar esa cima. Dentro de diez días no seréis las personas que sois ahora».

¿QUIÉN ES QUIÉN EN TRANQUILLUM HOUSE?

Frances Welty. Escritora de novelas románticas en época baja. Cincuenta y dos años, extrovertida, nada amiga de las dietas y la autodisciplina y de aquello que no sirva para disfrutar de la vida. Frances está ávida de experiencias. Y de amor. Rara vez se presta a hacer algo que no le apetezca. Padece unos terribles dolores de espalda y quizás algo de estrés.

Lars Lee. Cuarenta años, extremadamente guapo y adicto a los balnearios. Amante del buen vino, confiesa que siempre le sucede lo mismo: «Cedo a las tentaciones y luego expío, cedo y expío».

Carmel Schneider. Treinta y nueve años, divorciada y madre de dos niñas. Su autoestima está por los suelos, en parte porque su marido la dejó y se fue con otra mujer más joven. Obsesionada con perder peso y recuperar la figura que tuvo.

Jessica y Ben Chandler. Pareja de jóvenes atractivos que tras pasarlo muy mal económicamente ganó la lotería. Ahora están forrados, pero su matrimonio no marcha bien. Él está obsesionado por su coche de lujo y ella, por las operaciones de estética. Necesitan una terapia de pareja.

Tony Hogburn. Cincuenta y seis años, divorciado y exestrella de fútbol australiano. Quiere perder peso, aunque su aparente mal humor puede que no tenga que ver con esos kilos de más.

Heather, Napoleon y Zoe Marconi. Los dos miembros del matrimonio Marconi tienen cuarenta y ocho años. Zoe, su hija, veinte. Adictos al deporte, parecen estar en buena forma, pero necesitan aliviar el fuerte estrés que padecen desde hace un tiempo. Ocultan algo, quizás lo que les impide avanzar con sus vidas.

Maria Dmitrichenko, Masha. Directora del balneario. Altísima y atlética, extremadamente atractiva y con un enorme carisma. Era una ejecutiva de éxito hasta que sufrió un infarto y estuvo muerta durante un instante. Cuando regresó a la vida decidió reinventarse, crear Tranquillum House y especializarse en experiencias transformadoras. Quiere mejorar la vida de la gente y nada se va a interponer en su camino.

PASAJES DE LA NOVELA

«Nunca había sido muy dada a la abnegación, nunca había estado a dieta y rara vez decía que no si le apetecía decir que sí ni decía que sí cuando le apetecía decir que no. Según su madre, la primera palabra ávida de Frances había sido “más”. Ella siempre quería más.» «Las fotos de Tranquillum House la habían llenado de un deseo extraño e inesperado. Tenían un tono dorado, todas tomadas durante la puesta o la salida del sol o con un filtro que hacía que parecieran así. Gente agradable de mediana edad que hacía la postura del guerrero en un jardín de rosas blancas junto a una preciosa casa de campo.» «¡Había desfilado en la Marcha de las Mujeres! No era una “vergüenza para el feminismo” simplemente porque describiera el color de ojos de su personaje masculino. ¿Cómo podía alguien enamorarse de otra persona si no sabía el color de sus ojos? Y estaba obligada a atarlo todo al final con un “lazo enorme”. Esas eran las normas. Si Frances dejaba que sus finales fuesen ambiguos, sus lectoras irían a por ella con tridentes.» «Se acordó de su primer novio de hacía más de treinta años que le dijo que prefería pechos más pequeños mientras tenía las manos puestas sobre los de ella, como si las partes del cuerpo de las mujeres fuesen los platos de un menú y los hombres fueran los malditos comensales.» «A veces, era como si Zoe simplemente estuviese esperando a que pasara la vida, soportándola, tachando acontecimientos, días, meses y años de la lista, como si tuviese que superar algo indeterminado y, después, todo iría mejor, salvo que nunca lo superaba y nunca mejoraba y ella jamás le perdonaría. Su muerte había sido el “que te jodan” definitivo.» «A veces, la vida te cambia de una forma tan lenta e imperceptible que no lo notas, hasta que un día te despiertas y piensas: “¿Cómo he llegado hasta aquí?”. Pero, otras veces, la vida cambia en un instante, con un golpe de buena o mala suerte, con consecuencias maravillosas o trágicas. Te toca la lotería. Cruzas un paso de cebra en el momento equivocado. Recibes una llamada de un amor perdido exactamente en el momento preciso. Y, de repente, tu vida hace un giro brusco hacia una dirección completamente nueva.»

LA CRÍTICA HA DICHO

«Moriarty ha vuelto con otra novela adictiva.» Time «Ingeniosa y conmovedora, la escritura de Moriarty vale su peso en oro.» People

«Si había tres buenos personajes en Big Little Lies, hay nueve incluso mejores en Nueve perfectos desconocidos.» The New York Times Book Review

«Liane Moriarty es una maestra de la tensión sostenida.» The Washington Post

«Cada nueva revelación es una deliciosa sorpresa… Tan bien escrita y tan astutamente construida que no querrás que acabe.» Booklist

«Una novela llena de humor negro que desafía cualquier clasificación. Se las arregla para ser enormemente divertida e intensamente emocional al mismo tiempo.» Bustle

«Una novela adictiva de trama inteligente, continuas sorpresas y a menudo divertida que es también un thriller muy gratificante. Moriarty ha escrito otro éxito seguro.» Publishers Weekly

«Nadie escribe sobre los pequeños detalles de la vida de las mujeres con la agudeza y la fuerza de Moriarty… Siento celos de cualquiera que todavía no haya leído esta novela.» Grazia