Charlotte

Reseña del libro «Charlotte» de David Foenkinos.
Por Ander Terrones Arellano.

‘Charlotte’, de David Foenkinos, fue toda una sensación cuando se publicó, en 2014. La novela, escrita con estructura de poesía y con frases muy cortas, todas ellas de menos de una línea, cuenta la historia real de la pintora y escritora Charlotte Salomon.

Esta joven fue una de las prácticamente incontables víctimas del nazismo. Charlotte se refugió en el sur de Francia, desde donde tuvo que huir tras la invasión alemana. Por un error acabó en un campo de concentración, no sin antes haber logrado tras dos años la creación de su gran obra, mezcla de literatura y pintura: ¿Vida? ¿O teatro?

Al igual que las novelas gráficas de ‘Maus’ y ‘Hierba’, Foenkinos se introduce en la historia mostrando la investigación y sus sentimientos respecto a lo que está contando. En este caso no utiliza la entrevista con la protagonista de la novela, asesinada por los nazis, sino que usa su autobiografía y su obra para trazar un relato, mezcla de ficción y realidad, e imagina la mente y los sentimientos de la artista, creando una especie de unión a través de la literatura entre él y la joven.

El propio Foenkinos dijo que el libro se podía considerar una novela por lo que, a pesar de estar apegado a la realidad, el autor usa su libertad creativa para mostrar lo que creía que Charlotte pensaba y sentía. Sin embargo, el cruce de géneros en el libro es evidente y todo tiene su espacio: la ficción y la no ficción, la parte autobiográfica de Foenkinos y la biografía de Charlotte Salomon… El escritor rompe cualquier tipo de encorsetamiento y hace uso de lo que necesita en cada momento para transmitir lo que quiere. Al igual que Salomon en su obra ¿Vida? ¿O teatro?, Foenkinos mezcla distintos tipos de narrar.

Al principio sorprende y puede alejar al lector la estructura del texto, con frases de menos de una línea, cortas y casi todas de la misma extensión. Pero si se omite eso la experiencia que se logra con Charlotte es única. El autor dice en la propia novela que pasó mucho tiempo decidiendo cómo escribir la historia, que le llevaba obsesionando durante muchos años. Investigó y viajó a Alemania varias veces, deseando empaparse de todos los lugares por los que pasó Charlotte.

La novela se puede leer de una sentada, apenas llega a las doscientas páginas y por su estructura es aún más corta, pero merece más la pena ir degustándola en pequeñas píldoras. La carga emocional que transmite el escritor en todo el texto puede sobrepasar en algunos puntos y, además, es posible perderse algunos detalles si no se lee con la suficiente atención. Por este tipo de cosas, David Foenkinos es uno de los nombres que más se escuchan de la literatura actual.

Por Ander Terrones Arellano
@anderterrones