LA CAJA NEGRA. LOS PERROS VUELAN BAJO, DE ALEK POPOV

Una mordaz sátira política en la que los mitos del capitalismo palidecen bajo la afilada mirada de uno de los mejores escritores búlgaros de nuestros días.

Ganadora del Premio Elias Canetti
A partir del 4 de marzo en librerías

Sátira social y comedia negra, Bulgaria y USA, dos hermanos (Ango y Ned), paseadores de perros y yuppies de Wall Street, las cenizas de un padre. Todo esto cabe en La caja negra del autor búlgaro Alek Popov, traducida a 8 idiomas y ahora en castellano.

Una versión grotesca del american way of life en su versión búlgara.

Bienvenidos al cinismo balcánico: una mezcla de humor del Este con el desasosiego que deja a su paso la aplastante globalización.

SINOPSIS
En 1990 una caja negra llega a Sofía desde Estados Unidos. En su interior descansan las cenizas del catedrático Banov, padre de Ned y Ango, fallecido en circunstancias extrañas durante una estancia como profesor visitante en Filadelfia. Quince años después, las vidas cada vez más distantes de los hermanos vuelven a cruzarse en Nueva York. Ned vive desde hace años en la Gran Manzana y ha conseguido ascender a la cima de Wall Street para convertirse en un BTE (Búlgaro que Triunfa en el Extranjero), mientras que Ango, tras fracasar como editor en Bulgaria, acaba de llegar a la gran ciudad y debe conformarse con ser paseador de perros. Su reencuentro desencadena un torbellino de acontecimientos delirantes que los arrastrará al epicentro de una macabra trama, financiera y canina, capaz de sacudir los cimientos del sistema. Esta comedia cáustica, impregnada de cinismo balcánico, explora la oscura lógica del capitalismo moderno.

Con gran ingenio, Popov profundiza en las tensiones familiares y desmantela la dicotomía entre el triunfador expatriado y el perdedor que se quedó en casa, enfrentando Este y Oeste, Wall Street y las ruinas del comunismo.

ENTREVISTAMOS A ALEK POPOV

Durante la mayor parte del siglo xx, incluso ahora, el “sueño americano” encarna la visión popular del éxito y la felicidad. Este sueño ha sido, y sigue siendo, la fuerza motriz de la migración, pero tales modelos tienden a ser engañosos y las personas, tarde o temprano, se dan cuenta de esto. Llegar a ese punto suele ser la parte más interesante de la historia.

Todo comienza con auto-ironía. Primero debes aprender a mirarte a ti mismo, más concretamente a tu propio ego con sentido del humor, y solo entonces, aprender a mirar críticamente a los demás. La auto-parodia es una prueba de inteligencia a la que debemos someternos diariamente. Porque sin inteligencia no hay tolerancia. Y sin tolerancia, estamos perdidos.

ALEK POPOV NOS RESPONDE A UNAS PREGUNTAS

1) Sabíamos que la novela se inspira de alguna manera en hechos autobiográficos. El punto de partida de la historia realmente sucedió en su vida real: usted perdió a su padre mientras él daba clases en Estados Unidos, en Filadelfia. ¿Podría explicarnos cómo surgió la idea de la novela? ¿Fue esta experiencia personal el punto de partida? La historia parte de una experiencia vital propia. Perdí a mi padre de forma inesperada durante mi último año de estudios en la Universidad de Sofía. Mi padre estaba en Estados Unidos enseñando matemáticas como profesor visitante en la Universidad de Filadelfia. Era un erudito muy respetado en su campo. La causa inmediata de su muerte sigue sin estar clara a día de hoy. Fue en aquel entonces, cuando reinaba el caos político y económico que siguió a la transición en Bulgaria, cuando llegaron sus cenizas en una caja negra de plástico. Estos son los antecedentes reales de la historia y el punto de partida de mi novela. Siempre supe que en cierto momento de mi vida escribiría sobre esto. Y llegó el momento quince años después durante una estancia en Nueva York. Fue en 2002, solo un año después del desastre del 11 de septiembre. Caminaba por el área de la Zona Cero, cerca de los paneles donde todavía colgaban las fotos de los desaparecidos. Y de repente me invadió un sentimiento extraño. ¿Qué pasa si encuentro la foto de mi padre entre los demás? Era una locura, pero comencé a especular: cómo nos había engañado a todos al ocultar su desaparición y haberse reinventado a sí mismo, comenzando una nueva vida como banquero de inversiones, casándose, teniendo otros hijos, etc. Más tarde, decidí no usar ninguna referencia al 11-S en la novela. Aunque las dudas sobre la muerte del padre sí están en el personaje de Ango, el hijo mayor … Para mí, la parte más difícil fue encontrar un equilibrio entre mi experiencia real y la libertad de la ficción para poder resolver la historia. Establecer una distancia que ayudara a mis personajes a crecer y seguir su propio destino.

2) Es la primera vez que su trabajo se traduce al español. ¿Qué sentimiento o ideas le gustaría dejar en los lectores una vez que lean La caja negra? Hasta ahora, solo se había traducido un cuento mío al español, hace ya varios años: El servicio, publicado en la revista Cuadernos del Ateneo. Es una historia oscura y absurda inspirada en una pesadilla. La caja negra es mi primera novela en español. Lo que más me importa es el placer de la lectura. ¿El lector realmente lo está disfrutando? Creo que las ideas y los mensajes no deben imponerse de manera forzada al lector, no han de enseñarse ni predicarse sino fluir naturalmente como si estuvieran codificados en la historia. Esto en cierto modo se refleja en mi novela, que trata en gran medida de romper con los estereotipos o la normalidad. Para mí, la parte más interesante de publicar en el extranjero es observar cómo el público entiende el sentido del humor y lo absurdo de la realidad de los Balcanes.

3) ¿Se da cuenta de que algunos de los lectores descubrirán la actual Bulgaria a través de su novela? Muy posible de hecho. Es una forma justa de viajar sin dejar huella de carbono, y aun mejor si no le gustan los puntos de interés turístico y las curiosidades que lo acompañan. Diría que es una excelente manera de explorar lugares peligrosos y conocer personajes extraños sin estar realmente en peligro.

4) Los dos personajes principales, Ned y Ango, representan dos experiencias diferentes sobre la inmigración. ¿En cuál se siente mejor identificado? Ned y Ango representan los estereotipos de éxito y fracaso (respectivamente) profundamente arraigados en nuestra cultura consumista. Estereotipos que afectan a nuestro bienestar psicológico en muchos niveles. Durante la mayor parte del siglo xx, incluso ahora, el “sueño americano” encarna la visión popular del éxito y la felicidad. Este sueño ha sido, y sigue siendo, la fuerza motriz de la migración, pero tales modelos tienden a ser engañosos y las personas, tarde o temprano, se dan cuenta de esto. Llegar a ese punto suele ser la parte más interesante de la historia. En cuanto a los protagonistas, supongo que hay algo de mí en ambos y, al mismo tiempo, ninguno de ellos refleja literalmente mi forma de vida ni mi ser interior. Como escritor, he desarrollado la capacidad de manejar múltiples identidades y encarnar diferentes personalidades: es una especie de actuación. Exploro y profundizo en mis personajes encarnándolos. Luego, nuevamente a través de ellos, me conozco mejor.

5) La novela es una sátira, llena de humor negro. ¿Podría definir qué es el humor para usted? ¿Una forma de entender la vida real? El humor es quizá la cualidad más humana. No imagino vivir en un mundo sin humor. Es un arma universal, o, si lo prefieres, un medicamento contra la tiranía. Merece un mayor respeto por parte de los críticos, pero desafortunadamente no siempre es el caso. El humor es cuestión de inspiración, casi como la poesía. No puedes decir: “ahora me sentaré y escribiré algo gracioso”. La ironía es un talento muy especial. Todo comienza con auto-ironía. Primero debes aprender a mirarte a ti mismo, más concretamente a tu propio ego con sentido del humor, y solo entonces, aprender a mirar críticamente a los demás. La auto-parodia es una prueba de inteligencia a la que debemos someternos diariamente. Porque sin inteligencia no hay tolerancia. Y sin tolerancia, estamos perdidos.

6) Uno de los aspectos tratados en la novela es el talento en el extranjero. En España en los últimos años, debido a la crisis, hemos visto a muchos jóvenes marchar al extranjero en busca de un futuro mejor. Muchos son académicos e investigadores. En su novela, de alguna manera, también muestra esta realidad (aunque fue escrita hace 12 años). ¿Qué opina al respecto? ¿Es así también en Bulgaria? Si crees que estás viviendo tiempos difíciles, este libro probablemente te hará sentir un poco mejor y más afortunado. En mi opinión, la gente de Europa del Este ya se ha adaptado a la realidad que llega desde Occidente: un estado constante de inseguridad y volatilidad que emula los patrones y la dinámica de la bolsa de valores. En cuanto a los científicos e investigadores tanto en el Este como en el Oeste, un buen número de ellos se ha unido a la creciente comunidad de nómadas intelectuales en constante búsqueda de subvenciones y becas. Escritores y artistas siguen la tendencia. Es una forma de vida que puede parecer estimulante y genial desde el exterior pero siempre tiene un precio.

Artículo anteriorEl Golem de Gustav Meyrink
Artículo siguienteCamilla Läckberg desembarca en Planeta con ‘Mujeres que no perdonan’