La selección

Reseña del libro «La Selección», de Kiera Cass. Por Fernando Arévalo.

La Selección es la primera parte de una pentalogía distópica escrita por Kiera Cass. La obra relata que Estados Unidos ha pasado a llamarse Ylléa. Pero eso no es lo único diferente. Además, una monarquía gobierna el país y la sociedad está dividida en un complejo sistema de castas de ocho niveles. En ese sistema, el Uno representa a la realeza, mientras que el Ocho, a las personas indigentes; por lo que las posibilidades de empleo y el nivel de vida de las personas dependen de la casta en la cual hayan nacido.

Dentro de este universo, cada vez que un príncipe necesita esposa, se convoca la Selección, un concurso al que se invita a una chica por cada provincia del país para competir por el corazón de este. Aparentemente, se trata de un medio para mantener la simpatía del público hacia sus gobernantes, puesto que la reina terminaría proviniendo del pueblo.

La protagonista, América Singer, es una Cinco, así que pertenece a la casta de los artistas. Pese a que no muestra interés en la Selección, termina rellenando la solicitud con el fin de ayudar económicamente a sus padres, dado que las familias de las participantes reciben una remuneración. Como es seleccionada, se va a vivir a Palacio, donde no podrá resistirse al príncipe Maxon. Ahora bien, América tendrá que competir contra treinta y cuatro chicas, y contra su propio corazón, si quiere ganar el concurso y casarse con él.

La Selección es una novela que cuenta la historia de un romance apasionante y es narrada ágilmente por la misma América. Asimismo, el universo planteado por la autora es complejo, ya que el sistema de castas genera mucha curiosidad. Sin embargo, esto último podría considerarse su punto más débil.

El libro menciona temas muy interesantes sobre los que no se cuenta mucho al final. Es cierto que se trata de la primera parte de una saga de cinco novelas, pero parece que todos esos tópicos solo existen en la obra de manera superficial y no tienen un verdadero impacto en la trama; de hecho, podrían no existir y no habría ninguna diferencia. Simplemente están porque los personajes hablan de ellos en algunas ocasiones. De manera que no hay profundización sobre asuntos como el sistema de castas y la insatisfacción política de la nación. Aunque, afortunadamente, esto mejora en los demás libros.

Además, hay algunas «exigencias del guion» que desconciertan; es decir, ciertos sucesos solo ocurren para que los personajes se comporten de manera incoherente y se justifiquen sus decisiones; algo que puede volverse especialmente desagradable en las últimas páginas del libro.

No obstante, la lectura de La Selección es muy entretenida y adictiva. Para los jóvenes que se inician en el fascinante mundo de la literatura, este libro es un acierto. Para aquellos lectores experimentados que quieren leer algo ligero para salir de lo habitual, esta obra puede representar lo que están buscando, especialmente si se quiere superar el famoso “bloqueo lector”, dado que se lee bastante rápido.

Por Fernando Arévalo
@fernandoj_arevalo