La última vecina

Hoy en el Blog os traemos la reseña de una novela que es una pequeña joya La última vecina de Ana Viladomiu, y si os estáis preguntando el calificativo de “pequeña joya” la cuestión es muy sencilla esta novela encierra en sus escasas 350 páginas la historia de una de las grandes joyas de la arquitectura catalanes La Pedrera, el edificio más emblemático de Antonio Gaudí, pero estamos ante una historia diferente ya que vamos a entrar en las tripas de La Pedrera, de la mano de La última vecina que vivió en esta magnífica construcción.

Martina Meseguer es una de las pocas personas que aún vive en el emblemático edificio, con todas las ventajas y  los mil inconvenientes que supone vivir en un edificio monumental como es

La Pedrera, desde hace un tiempo la relación de Martina con su marido no atraviesa sus mejores momentos y para colmo de males comienzan unas obras de limpieza y restauración de la fachada del monumental edificio con los que la oscuridad provocada por las lonas que cubren el edificio se ha unido a la oscuridad que Martina presiente que acecha a su relación de pareja.

Para intentar salir de la monótona oscuridad que parece haberse adueñado de su existencia, Martina comienza a documentarse para escribir su próxima novela, una historia en la que tratará de recuperar la historia del emblemático edificio pero a través de sus moradores a lo largo de la historia.

Sorprende desde las primeras páginas el carácter íntimo con el que la autora dando voz en primera persona a Martina para narrarnos su propia vida nos introduce en el día a día una construcción tan singular como es La Pedrera, y nos habla del momento en el que llegó a vivir en el edificio, de sus dificultades a la hora de amueblarla y de cómo hasta la pintura de las paredes originales de la construcción llegaron a afectarla anímicamente.

Basándose en su propia experiencia pues la autora Ana Viladomiu lleva 30 así viviendo en el edificio nos va desgranando la historia íntima y vital de este singular monumento que para ella no es más que su hogar, a través de las  conversaciones que va manteniendo con antiguos inquilinos que en su día formaron parte también del discurrir cotidiano del edificio, irá rescatando retazos de historia viva.

Bien documentada y con una estructura sumamente atractiva La última vecina es una historia vital, es la narración de un proceso de evolución interior tanto a nivel arquitectónico como a nivel personal , lo que consigue que el lector fluya por la narración empatizando fácilmente con Martina. Para mi ha supuesto un primer acercamiento a la narrativa de Ana Viladomiu y os puedo asegurar que no va a ser la última habrá que escarbar en su bibliografía porque he quedado fascinado por la cercanía y la intimidad de su prosa.

Agradecer a Roca Editorial el habernos enviado un ejemplar de la novela para su lectura y reseña en el Blog.