Muestras privadas de afecto

Muestras privadas de afecto
de Guillermo Alonso

Biografía del autor

Guillermo Alonso (Pontevedra, 1982) es escritor, aunque ejerce como periodista la mayor parte de su tiempo. Comenzó trabajando en Shangay y Telecinco, ha dirigido la edición digital española de Vanity Fair y actualmente es editor web de ICON, el suplemento masculino de El País. En 2019 publicó su primera novela Vivan los hombres cabales (con la editorial niños gratis) y el ensayo Michael Jackson: música de luz, vida de sombras (con Random House). En 2020 vio la luz el relato La cabeza de los Martínez en la antología de relatos Y todos tus días malos acabarán (Libros Walden). Ha colaborado, además, con El País Semanal, Vanidad, Marie Claire, Hércules, Candy, Fanzine 137, OnMadrid y EP3 y en 2006 fue co-creador y guionista de un concurso en una televisión autonómica que solo duró tres meses en emisión, pero que algún día le dará para escribir su propio Crimen y castigo.

Sinopsis

«Una luz que nunca se apaga —y que bien podría ser un fantasma— y un patito de goma gigante son los inopinados desencadenantes de una serie de acontecimientos que llevarán a Ramón Mañana, un diletante de provincias atrapado en esa edad en la que ya no se es joven pero todavía no se es viejo, a embarcarse en un viaje inesperado. En su odisea navegará las turbulentas aguas del periodismo gotcha, el nuevorriquismo madrileño y el lumpenproletariat de la farándula, combinadas en un sorprendente thriller tragicómico que retrata a su fascinante elenco de personajes con tanto acerbo como compasión.
La soledad, el aislamiento y la telebasura se arremolinan para formar una historia acerca de las familias —biológicas y escogidas— y cómo estas determinan los destinos de sus miembros más allá de lo que nos gusta aceptar. La historia salta de la comedia al drama, de lo ridículo a lo majestuoso, del lujo a la sordidez, resultando un zig-zag trepidante lleno de giros que atrapa al lector y le sumerge en un mundo extraño donde la moral dominante ya no aplica y lo que se considera normal es mucho más amplio.
Muestras privadas de afecto es, en cierto modo, una novela picaresca del s. XXI. O tal vez un cuento moral, o realismo como el de Dickens o sencillamente una historia rocambolesca e imposible —pero completamente posible— llena de sentimiento y alma. O todas las anteriores».

Rafael de Jaime Julià

«Extraordinario retrato de un personaje y unas circunstancias tan ridículos y sórdidos como extrañamente acogedores»
Vanity Fair

[PDF] Descargar el primer capítulo

«En verano de 2019 leí una noticia en la prensa local gallega sobre un tipo (en realidad, era una pareja) que se había quedado dormido en un patito hinchable y había acabado a la deriva en la ría de Pontevedra. La noticia iba acompañada de una imagen de él, un chico joven, posando con cierto orgullo y cierta vergüenza al lado del pato amarillo y enorme. Yo llevaba un tiempo empezando a escribir algunas historias que no iban a ningún lado y pensé que ese era un buen comienzo para una trama. Empecé a escribir sin saber muy bien dónde iba a llevarme, pensando en qué le había pasado a ese chico antes de subirse al pato y en qué le pasaría después. Y salió esta historia»

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