Equilátera
de Bruno Galindo Ravlic

El secreto de aburrir es contarlo todo, decía Voltaire. Pero yo sé que si Bruno Galindo ?narrador, periodista, crítico musical, experto en hienas y demoliciones, poeta abisinio? se decidiera un día a contárnoslo todo, ni un segundo nos aburriríamos. Porque está entre los más imaginativos y valientes narradores de este país. Es el escritor portátil, por excelencia: algo que hasta en Corea saben. Por eso es extraño que no haya sido mucho más leído y más reconocido entre nosotros, porque es simplemente uno de los grandes.

Viajero incondicional y poeta inesperado, Bruno Galindo vertebra en este libro tres historias que dibujan un triángulo equilátero perfecto sobre el mapa de África: desde la pequeña aldea en Etiopía donde Arthur Rimbaud buscó refugio hace más de 100 años, hasta el Golfo de Guinea, con el impresionante desierto africano cerrando su tercer vértice. 25.000 kilómetros cuadrados de superficie, un viaje que ocurrió hace mucho tiempo, una experiencia que sobrevive al olvido y la poesía para vertebrar la mirada y experiencias de Bruno Glindo.

Sobre el libro

Un poemario concebido como un tríptico psicogeográfico en el continente africano, que recupera un viaje insólito y el lado poético del autor.

“El secreto de aburrir es contarlo todo, decía Voltaire. Pero yo sé que si Bruno Galindo —narrador, periodista, crítico musical, experto en hienas y demoliciones, poeta abisinio— se decidiera un día a contárnoslo todo, ni un segundo nos aburriríamos. Porque está entre los más imaginativos y valientes narradores de este país. Es el escritor portátil, por excelencia: algo que hasta en Corea saben. Por eso es extraño que no haya sido mucho más leído y más reconocido entre nosotros, porque es simplemente uno de los grandes. Véanse Remake (su anterior libro) y este impresionante Equilátera”.  

Enrique Vila-Matas

Bruno Galindo es uno de los creadores más laterales que conozco. Poeta, narrador, ensayista, DJ, periodista y gestor cultural, músico e intérprete de spoken word, guionista de televisión y de podcast: son muchas las palabras que definen su dimensión profesional y artística, pero tal vez ninguna lo haga tan rotundamente como la de viajero. Viajero por las rutas del mundo: nació en Buenos Aires, ha sido reportero en Irak, Palestina, Etiopía y Corea del Norte, ha estado con Miquel Barceló en Mali y con Arnaldo Antunes en São Paulo, conoce América del Sur como la palma de su mano y en cualquier momento puede estar embarcando hacia su próximo destino. Nómada en su propia ciudad: durante varios años no contó con domicilio fijo y es madrileño en el sentido más cosmopolita del gentilicio. Pero —sobre todo— viajero mental. Une en su poética los versos de Lorca o el flamenco de Enrique Morente con el pop de los argentinos Babasónicos, la performance o los afrohaikus. Como el caballo, que se mueve mediante saltos por el tablero de ajedrez, las conexiones que realiza con sus proyectos nunca son obvias, sino psicogeográficas, propias de una mirada absolutamente lateral.

Equilátera integra y reimagina los dos poemarios anteriores de Bruno Galindo, Lunas hienas (2001) y África para sociedades secretas (2002), que desde su concepción formaron parte de una trilogía que ahora se completa con Duna 45 (2003). Empieza con un mapa y acaba con un glosario. Entre ambos extremos, la representación gráfica y el diccionario, los poemas se suceden como ondas cerebrales, pasos a pie y kilómetros por carretera, llenos de polvo y de imágenes, testimonios del continente real y ficciones del continente posible. O no.

*Contenido original proporcionado por la editorial 

Enlaces de compra

eBook

,

Papel

Descubre las últimas Novedades Editoriales haciendo clic en la imagen

Artículo anteriorLa extraordinaria vida de un hombre corriente
Artículo siguienteAlmas honestas