Reseña del libro «La ridícula idea de no volver a verte» de Rosa Montero.
Por Paqui Bernal.
Había leído poco de Rosa Montero. Y seguramente lo que había leído pertenecía a ese grupo de novelas que ella sitúa en un periodo (largo, de unas cinco obras) en el que aún no había dado rienda suelta a su imaginación.
En este libro lo explica: que la necesidad de igualdad de las jóvenes de la Transición las llevaba a imitar a los hombres, no sólo en su aspecto físico -poco femenino- sino hasta en su racionalidad.
Rosa se compara en esa actitud con Marie Curie, cuyo diario (escrito tras el fallecimiento de Pierre Curie) comenta en este libro a petición de su editora. Lo que en un principio había de ser un prólogo se fue alargando hasta convertirse en una obra de la autora.
No sabría muy bien cómo definir el género. El libro realiza un paralelismo entre las vertientes humana y familiar de Marie Curie y las de la autora. Asombra lo exhaustivo de la documentación previa: ¡Rosa Montero leyó unas seis biografías de Marie Curie, además de su correspondencia con familiares y conocidos! A partir de todo ello, la escritora intenta deducir detalles sobre la vida y la personalidad de Marie Curie. Y lo hace con gran inteligencia e intuición.
No tiene reparos en recurrir a algo que a menudo se considera un demérito en un narrador: utiliza fotos e ilustraciones – de artistas y de personajes curiosos, como la Papisa Juana, por ejemplo- para apoyar sus argumentos y, en ocasiones, para tomar el pelo al lector.
También cita continuamente frases de escritores (como Patricia Highsmith o Carmen Laforet), de cómicos, etc.
Un dato curioso: subraya los conceptos que más le interesan por medio de hashtags, en lugar de mayúsculas o cursiva. Hay incluso un glosario al final del libro.
Rosa tiene un estilo muy directo, a través del cual expresa maravillosamente la ironía o el humor. Como cuando explica por qué Curie se hizo institutriz: “Las mujeres de clase media no podían emplearse salvo en unos pocos oficios de perfiles resbaladizos: institutriz, dama de compañía… O escoger algunas de las tres ocupaciones tradicionales: monja, puta o viuda”.
Son constantes a lo largo del texto las digresiones acerca de casi todo: ciencia, política, sobre cómo nos marcan las infancias felices o infelices, sobre nuestra necesidad de honrar a los padres, la anorexia, el feminismo. Se extiende en cómo el romanticismo hace vivir de maneras diferentes el amor y el desamor a hombres y a mujeres… Y al dar la vuelta a cada esquina aparece El Tema: la viudez. La viudez en parejas largas y bien avenidas como lo fue la suya.
Creo que el ejercicio de ir desgranando su duelo a través del de Marie Curie lo diluye, y facilita que la autora sea capaz de sincerarse y ahondar más en sus sentimientos.
En conclusión, yo no diría que “La ridícula idea de no volver a verte” es una novela, pero tampoco diría que es no-ficción. En lo que sí creo que muchos coincidirán conmigo es en que se trata de un texto didáctico, entretenido, divertido y profundamente sentimental. Un buen libro.
Por Paqui Bernal
@_PaquiBernal
Título: La ridícula idea de no volver a verte Autor: Rosa Montero Editorial: Seix Barral Páginas: 240 ISBN: 978-8432215483 |