La Sociedad Jane Austen

Reseña del libro «La Sociedad Jane Austen» de Natalie Jenner, por Beatriz Alcaná

Hay dos lugares en Inglaterra a los que los y las entusiastas de Jane Austen debemos peregrinar al menos una vez en la vida. El primero de esos lugares es la bellísima localidad de Bath, donde la inmortal escritora vivió algún tiempo y donde situó la acción de algunas de sus historias. El segundo es el pequeño y encantador pueblo de Chawton, en Hampshire. Allí pasó Austen los últimos ocho años de su vida y allí puede visitarse la casita en la que residió y que desde 1949 alberga un museo en su honor.

La novela que hoy reseño, La sociedad Jane Austen, nos traslada precisamente a Chawton, en concreto a los años cuarenta. Tras la Segunda Guerra Mundial, no quedan más que un puñado de familiares lejanos de la autora de Orgullo y Prejuicio, y ninguno de ellos pasa por su mejor momento. Para evitar que el legado de Jane Austen desaparezca, un grupo de vecinos del pueblo funda una particular sociedad. En ella coincidirán un médico viudo, una maestra de armas de tomar, un tímido jornalero y hasta una estrella de Hollywood. Lo único que parecen tener en común es su amor por la literatura, pero poco a poco irán descubriendo que también pueden ayudarse los unos a los otros para superar sus tragedias personales y llenar los vacíos que el conflicto bélico dejó en sus vidas.

Tengo que subrayar que Natalie Jenner, su autora, ha llevado a cabo una exhaustiva labor de documentación antes de ponerse manos a la obra con este libro en el que recrea los acontecimientos que culminarían con el nacimiento de una institución consagrada a conservar y divulgar el legado de esta grande de las letras inglesas. También tengo que advertir que mientras leía La sociedad Jane Austen no dejaba de preguntarme cuánto había de realidad y cuánto de ficción en las peripecias, desventuras, amoríos y trapicheos que se relatan en este bestseller. Para quienes no quieran esperar a llegar al final y salir de dudas gracias al epílogo en el que la propia Natalie Jenner lo aclara, siempre queda la opción de buscar respuesta en la web del museo de Chawton. Sin embargo, mi consejo es que se disfrute de esta historia sin prejuicios, tan solo dejándose llevar por el espíritu austeniano que la impregna, por unos personajes entrañables que nos cautivarán y por el tono esperanzador que posee.

Si sois fans de Jane Austen, si os gustan las historias muy british y amables ―un poco al estilo de La sociedad literaria y el pastel de piel de patata o de Todas las criaturas grandes y pequeñas―, o si sencillamente os apetece algo de buena narrativa histórica, os aconsejo que le echéis un vistazo a La sociedad Jane Austen: una lectura amena y con carácter, que hará un poco más llevadero este caluroso verano.

Por Beatriz Alcaná
@AlcanaBeatriz