Veinte Razonez de Peso en una caverna improductiva
de Alexandre Guamis Alegre

Cuarenta años dedicados a recoger retazos de momentos, pasiones y sensaciones en las treguas sensitivas del ajetreado devenir del día a día. El autor utiliza el símil de Platón, y se reconoce atrapado dentro de la esa caverna, aunque es consciente que la Poesía puede ayudar a alcanzar el verdadero conocimiento.

La poesía puede aportarnos iluminación dentro de la caverna que no nos permite ver más allá. Esa oscuridad nos mantiene aletargados y vacíos de sensaciones profundas, de ordenar y dotar de sentido esa amalgama indefinida que nos llega sensitivamente y que vemos de espaldas reflejada en la pared de la caverna.

El autor nacido en 1978, desconocido e inédito hasta el momento, no tuvo en casa una gran biblioteca heredada, descubrió en su niñez y adolescencia a los clásicos, y también a las vanguardías y en general a la propia poesía con mayúsculas y con minúsculas, en pequeñas cápsulas de conocimiento seleccionadas quirúrgicamente, en un viejo plan de estudios de lengua y literatura castellana en el desaparecido EGB. ¿Puede reunir una antología una capacidad divulgativa? La respuesta la encontrarás en esta antología que no te dejará indiferente, y con la que aprenderás mucha poesía a través de la evolución del poemario de este hijo de la EGB.

Sobre el libro

El autor de esta breve Antología, que aquí se auto presenta, no es más que uno de tantos urbanitas con el que usted debe haber cruzado su mirada en el ajetreado devenir de la vida en el mundo moderno. Entre el bochorno del gentío apresurado en su lucha por la supervivencia diaria, y el bullicio cercado en un descontrol contenido. El poeta ha buscado atiborrarse de sensaciones, olores y estados de ánimo, propios y ajenos, absorbiendo la cercanía de rostros anónimos que se agolpan en reducidos vagones de metro, y en estrechos autobuses urbanos.

Gente y más gente, esculpiendo sus momentos en el aire. Aunque ellos no lo saben, son en parte el trasfondo de mi historia, y acompañamiento en la plasmación final en una pequeña libreta de muchos de los poemas. Comparten caverna conmigo, están en las mismas. El poeta se muestra aquí como una cabeza más que sobresale entre la masa alienada en su lucha diaria. Anhela la belleza y juguetea con la captura de sensaciones. El alma sensitiva se manifiesta a veces espontáneamente como una necesidad vital, que es muchas veces acallada por largo tiempo dentro del tumulto. Un tumulto que es oscuro, y en el que todo y todos vacían de contenido sus sensaciones.

*Contenido original proporcionado por el autor

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