Fundación Pioneros. La primavera de los genios de Cándido Arechavaleta García

Sinopsis:

FUNDACION PIONEROS. LA PRIMAVERA DE LOS GENIOS Logroño Marzo 2019 Voy a intentar hacer una sinopsis de la obra. La trama principal bascula en la evolución de unos cuantos chicos superdotados para el ajedrez en un centro de tecnificación un tanto especial. Este centro intenta emular en el presente o quizás un futuro próximo, a aquellos centros de Pioneros de la antigua Unión Soviética en los que los más dotados recibían las enseñanzas más avanzadas en pos de convertirse en adalides del país, en los mejores representantes del juego-ciencia. Existe una figura trascendental en toda la obra que es la del Director, un veterano gran maestro a caballo entre el siglo XX y XXI que tratará de explotar al máximo las habilidades de estos alumnos. Servirá no sólo como dinamizador pedagógico, sino emocional, personal, etc.…Un MAESTRO con todas las letras. Los chicos representan simbólicamente los diferentes tipos de inteligencia, más o menos personal, más o menos matemática, más o menos artística o intuitiva. Hago especial hincapié en que no resulten de cartón-piedra, por eso incido mucho en cómo razonan o piensan cada uno, que tiene su extrapolación en su tipo de juego. La obra desliza desde el principio la omnipresencia de la inteligencia artificial como un verdadero tsunami en este mundo del ajedrez, puesto que ya ha conseguido batir todos los límites humanos, aunque aquí intento dar un margen todavía a las capacidades humanas. La explicación sobre este asunto es muy prolija porque supone (esto es cierto, no es novelado) la posibilidad de que la Inteligencia Artificial, termine desnudando el juego, decodificándolo por completo como menciono en alguna ocasión. Escoltados por el uso de la experiencia del Director, por entrenadores, y por esa inteligencia inhumana propia de programas de ordenador, los chicos buscan su objetivo que es convertirse en grandes maestros de ajedrez, el máximo galardón. Para evitar esa posible linealidad en la trama, desato una parte oscura dentro de la Fundación y es que a pesar de intentar mantener al lector la duda de si es la Inteligencia Artificial la que se va a utilizar para “dopar” a estos chicos, o si se va a intentar extraer, (destilar como digo) esa “esencia de lo humano” para mejorar chips, finalmente son ambas posibilidades las que intentará explotar la Fundación. Anna, la chica intuitiva, especial, resulta ser el objetivo de la Fundación para una experimentación clínica con el que hipertrofiar anatómicamente zonas de su cerebro relacionadas con la intuición, con la adivinación del pensamiento, con la pre-cognición, etc. When, un personaje de perfil bajo durante la obra, se revelará como el “pionero” sobre el que la Fundación ejecutará su otro objetivo. El hibridaje de lo tecnológico con lo humano para crear un super-jugador, una dimensión nueva del jugador de ajedrez. Y de esta forma, se establecen nexos de unión con sus predecesoras en el sentido de utilizar esa vanguardia con fines no tan “deportivos”. Existe una pequeña relación de “amor adolescente” no concluido entre Yan y Anna porque me pareció interesante suavizar de tanto ajedrez la novela. Y finalmente existe un duelo final entre dos integrantes del equipo en un supertorneo de élite que intenta reflejar la “posible supervivencia” de lo humano frente a lo “artificial”. Y algún otro final más trágico como la muerte/asesinato del Director. Resulta difícil en pocas líneas resumir todo este entramado porque luego cada chico sigue su propia evolución limando sus debilidades por los consejos del Director cuya figura como digo es crucial. Es como el exponente de todo lo que el ajedrez significa, tesón, lucha, conocimiento, psicología, y búsqueda de límites. Aunque él no sea un “superdotado como todos ellos”, alcanza también sus límites. Probablemente deje algo en el tintero y lecturas puede haber varias porque psicológica y simbólicamente, el mundo en blanco y negro del que hablo da pie a muchas de ellas

El autor:

Cándido, Candi para los amigos, es un aficionado al ajedrez de toda la vida. En nuestra charla nos contaba cómo ha sido su relación con el ajedrez y la creación de su novela:
Desde niño…

«Desde muy joven, buscaba los recortes de “El País” para reproducir la partida. No recuerdo haberme aburrido desde entonces. Solo necesito un libro de ajedrez. Ni siquiera tablero. Soy malo jugando, pero se “leer” sin necesidad de tocar piezas.»

Fundación pioneros. La primavera de los genios
Enamorado del ajedrez

«Por un lado está el típico idilio del chaval joven que se enamora del ajedrez porque ve en el juego algo que ningún otro tiene y que, a base de comprar libros, intenta descifrar qué era eso. El primer libro que leí fue una colección de partidas de Alekhine, luego Estrategia moderna de Pachman, revistas, etc. Siguieron docenas más de ellos a lo largo de treinta años. Diría como cualquier otro aficionado, que tengo para varias vidas.»
Autodidacta

«Ser autodidacta significa que vas a llegar hasta un punto en el que no evolucionas más. Todos nos engañamos en cierto sentido imaginando que nuestro ELO subirá, que podremos ganar a un rival con 200 puntos más que nosotros. El tiempo te demuestra que eso es un error. Pero también la edad te asegura que si el ajedrez te inocula su veneno, lo disfrutarás siempre. Volverás a él. Da igual tu nivel. Te producirá placer como juego. Yo estoy ahí.»
Jugador aficionado

«He disfrutado y disfruto jugando, no estudiando, de hecho, apenas he “estudiado” en sentido literal. No conozco ninguna apertura en profundidad, mi nivel es más que mediocre en finales, pero eso no tiene importancia si cuando juego un blitz me olvido del mundo. Me “enchufa”, y me “relaja” al mismo tiempo. Seguro que muchos de tus alumnos o lectores lo entienden.»