Los libros para leer a tus hijos o cuentos infantiles están ilustrados y diseñados para ser leídos, vistos o incluso escuchados, según las necesidades y gustos de cada niño.
Los libros que contienen una moraleja son los mejores para empezar a leer con los niños. Y no solo les descubrirás una nueva ventana a su imaginación si no que también aprenderán a ser mejores personas.
Impulsar las habilidades lectoras de los niños les hace descubrir y experimentar mucho más que la televisión y los videojuegos.
Te mostramos 10 libros para leer a tus hijos y según vayan creciendo ellos solos los podrán leer y disfrutar.
- Mi Camita de J.S.Pinillos
Este cuento está basado en la historia real de una niña y su camita.
Esta niña aprendió que durmiendo cada noche en su camita era muy feliz, porque su camita la quería muchísimo.
Una historia que puede servir de ejemplo a los millones de niños que no quieren dormir solos en sus camitas, para que entiendan las muchísimas ventajas y lo maravilloso que es dormir solos en sus camitas.
- Emocionario. Di lo que sientes de Cristina Núñez Pereira y Rafael Romero
Un itinerario a través de las emociones que tenemos cualquier ser humano. Con esta herramienta los niños crecerán aprendiendo a identificar cualquier sentimiento y aprenderán a controlarlos.
- El monstruo de colores de Anna Llenas Serra
El Monstruo de Colores no sabe qué le pasa. Se ha hecho un lío con las emociones y ahora le toca deshacer el embrollo. Una historia sencilla y divertida, que introducirá a pequeños y a mayores en el fascinante lenguaje de las emociones.
- Monstruo Rosa de Olga de Dios Ruiz
Monstruo Rosa es un cuento sobre el valor de la diferencia. Una historia para entender la diversidad como elemento enriquecedor de nuestra sociedad, Monstruo Rosa es un grito de libertad.
- El Principito de Antoine De Saint Exupery
Viví así, solo, sin nadie con quien hablar verdaderamente, hasta que tuve una avería en el desierto del Sahara, hace seis años. Algo se había roto en mi motor. Y como no tenía conmigo ni mecánico ni pasajeros, me dispuse a realizar, solo, una reparación difícil…
- Yo Voy Conmigo de Raquel Díaz Reguera
A una niña le gusta un niño, pero el niño no se fija en ella, no la mira. ¿Qué hacer? Sus amigos le aconsejan de todo: que se quite las coletas, las gafas, la sonrisa, las pecas, las alas, que no sea tan parlanchina. El niño por fin se ha fijado en ella, pero, con tanto quitar, hasta se han ido los pájaros de su cabeza.
- La ovejita que vino a cenar de Steve Smallman
En casa del viejo lobo hambriento siempre hay para cenar una miserable sopa de verduras. Pero una noche llaman a la puerta de su pequeña cabaña y resulta ser ni más ni menos que una pobre ovejita que se ha perdido. El lobo, entonces, empieza a pensar que esa noche va a poder llenarse el estómago con un delicioso estofado…
- Caperucita Roja, Verde, Amarilla, Azul y Blanca de Bruno Munari y Enrica Agostinelli
Caperucita Roja escarmentó aquella vez que se la comió el lobo, así que en otra ocasión le dejó con las ganas. El lobo negro de Caperucita Verde, el lobo que acecha desde el coche a Caperucita Amarilla y el lobo marino de Caperucita Azul tampoco consiguen nada frente a esas niñas espabiladas que cuentan con tan buenos amigos. Y el lobo de Caperucita Blanca tiene tantas dificultades…
- Adivina cuánto te quiero. Mini cartoné de Sam McBratney
A veces, cuando queremos a alguien mucho, mucho, intentamos encontrar el modo de describir el tamaño de nuestros sentimientos. Pero como nos muestra esta maravillosa historia, el amor no es algo fácil de medir.
- Harry Potter y la Piedra Filosofal: 1 de J.K. Rowling
Harry Potter se ha quedado huérfano y vive en casa de sus abominables tíos y del insoportable primo Dudley. Harry se siente muy triste y solo, hasta que un buen día recibe una carta que cambiará su vida para siempre. En ella le comunican que ha sido aceptado como alumno en el colegio interno Hogwarts de magia y hechicería.