Dicen que te quise tanto

Reseña del libro «Dicen que te quise tanto» de Mar Moreno.
Por Paqui Bernal.

En “Dicen que te quise tanto” Mar Moreno nos sorprende dando un giro a su carrera literaria después de haber ganado varios premios en diferentes géneros en un espacio cortísimo de tiempo.

El tema de la novela resulta bastante obvio desde el principio porque la portada ya es muy reveladora. Pero, además, la primera escena resulta bastante elocuente. La protagonista, Isabel León, visita la tumba de una mujer. Y el guarda del cementerio le pregunta:

• Vamos a cerrar, señora. ¿Su hermana?
• No
• ¿Un familiar?

Isabel pone su mano sobre el mármol a modo de despedida, sin contestar.

• ¿Una amiga entonces?

Poco a poco nos vamos dando cuenta de que la autora narra la amistad de Isabel, una muchacha bien estante de La Carolina (en Jaen), con Laura, la hija de los guardeses de la finca de su padre. La madre de Isabel será la primera que la apartará de su amiga del alma por el pasado “rojo” de la familia de ésta, aunque aduce que lo hace para prevenir que Isabel se contagie de la mala educación de la niña.

Mar Moreno tiene una habilidad especial para crear la atmósfera, describiendo la moda y la música de los años cincuenta, o por medio de los objetos. Y es que la autora añade a sus descripciones un sinfín de pequeños detalles que colocan al lector en La Carolina, como un personaje más que estuviese viviendo los mismos hechos: oliendo comidas típicas de esa comarca, y paseando por lugares emblemáticos del pueblo y sus alrededores.

Mar Moreno demuestra un estupendo manejo del tiempo del relato y, aunque la historia baila continuamente entre el pasado y el presente, no nos perdemos. No sólo eso, sino que muy a menudo nos mantiene intrigados dejando la resolución de algún conflicto en suspenso hasta que regresa a ese momento que dejó abierto.

Además, hace un muy buen retrato de los personajes, en especial de la madre de Isabel, una señora neurasténica y egocéntrica. También del de Laura, mucho más osada que Isabel -al haberse criado en un ambiente familiar más libre-. El personaje de Damián (el novio de Isabel) es muy redondo: afecto al Régimen franquista, arribista, trepa y perdonavidas. Al igual que los de los Guardias Civiles, en su papel represivo de los disidentes. Pero debo decir que la autora no sólo consigue que cojamos afecto a cualquier personaje, sino incluso a otros a los que alguien simplemente alude, y eso es saber escribir.

Por otra parte, Mar describe muy bien las relaciones familiares, mostrando de una forma muy fidedigna del trato entre padres e hijos en esos años. En ese sentido me ha recordado algunas novelas de Antonio Muñoz Molina, cuando subraya la importancia de las relaciones con tíos y primos entre los andaluces, lo que en mi experiencia sigue siendo un signo de identidad.

También está muy bien dibujado el comportamiento de los novios durante el franquismo (cuando no tenían relaciones sexuales completas y habían de recurrir a tocamientos), el machismo y el control que estaban tan normalizados en la sociedad española. La autora consigue que la amistad íntima entre Laura e Isabel sea verosímil, a pesar de pertenecer a clases sociales distintas, narrando su aproximación con mucha paciencia y desde diferentes ángulos. De hecho, su encuentro amoroso se produce de una forma muy natural y tremendamente poética.

A modo de conclusión diré que “Dicen que te quise tanto” no es una novela llena de peripecia literaria. Pero parece que, como a Luís Mateo -el ganador del Premio Miguel de Cervantes 2023-, a Mar moreno le interesa más la llamada épica de la cotidianeidad, las hazañas de la gente corriente.

Un detalle curioso es que, mirando hacia atrás en la lectura de esta novela, he tenido la sensación de que está cargada de un fuerte componente onírico que le da a todo el texto un atractivo especial. En resumen, solo me queda recomendaros la lectura de “Dicen que te quise tanto” porque, por encima de todo, se trata de una historia muy bonita.

Por Paqui Bernal
@_PaquiBernal