María Jesús Pérez Navarro, autora de «El sufrimiento de las cigarras»

María Jesús Pérez Navarro, autora de «El sufrimiento de las cigarras»: «La clave es disfrutar y hacer disfrutar al lector».

Asegura que la de escritora es una profesión solitaria y llena de incertidumbre, que nunca se sabe si la que acabas de publicar será tu última novela… Pero tampoco si será la primera de una larga era de éxitos. Y a eso se agarra siempre María Jesús Pérez Navarro (Santomera, Murcia, 1987), llena de optimismo, consciente también de que ser capaz de enganchar al lector es fundamental. De su maestría para ello da fe su última novela, El sufrimiento de las cigarras, una historia con la que pasó del anonimato más absoluto a llamar la atención nada menos que de la editorial Penguin Random House.

¿Cómo te definirías como escritora, María Jesús?

Creo que como persona: trabajadora, muy organizada y con ganas siempre de superarme.

¿Y qué te llevó a escribir El sufrimiento de las cigarras?

Escribir siempre fue algo que tuve en mente desde que era niña y, aunque orienté mi carrera profesional en otro sentido (estudié Administración y Dirección de Empresas), esa idea siempre se mantuvo dentro de mí.

Una mañana, mientras estaba en la universidad, vinieron a mí lo que serían las primeras pinceladas de El sufrimiento de las cigarras: una desaparición, una joven que se sentía perdida y el final, que en este caso tuve claro desde el principio.

En cuanto tuve un poco de estabilidad laboral y pasé a tener libres los sábados por la tarde y los domingos… Empecé a escribir, no sabía a dónde llegaría, ni tan siquiera si lograría acabar la historia, pero cada semana avanzaba un poco más en la historia.

¿Qué pretendes transmitir con El sufrimiento de las cigarras?

El tema de fondo es el sufrimiento, sobre todo, el sufrimiento de las mujeres. Esto hace que sea una historia sencilla y compleja a la vez: es sencilla de leer, ya que cualquiera puede sumergirse en sus páginas. Pero también es compleja, debido a que entrelaza diferentes tramas, personajes y conflictos personales.

Me gusta describir la historia como una mezcla de misterio, amor y sufrimiento; una novela que está creada para que el lector se sumerja en sus páginas y no pueda dejar de leer, todo con el sufrimiento como telón de fondo, ese sentimiento que a la mayoría nos ha acompañado en algún momento de nuestras vidas.

Tu novela pasó de la autopublicación a llamar la atención nada menos que de Penguin Random House, ¿cómo fue ese momento? ¿Y qué ha supuesto en tu carrera?

Soy consciente de que he tenido mucha suerte, y me siento tremendamente afortunada por ello. En abril de 2019, El sufrimiento de las cigarras ganó el segundo premio en el I Certamen de Novelas Casino de Monóvar, en ese momento pasé de ser una total desconocida (muy pocas personas sabían que escribía) a conseguir una edición gratuita en Caligrama, por aquel momento el sello de autoedición del grupo Penguin Random House.

A esto se sumó el premio Best-Seller Caligrama en julio de 2022 y que ha supuesto la reedición de la novela en B de Bolsillo y el salto de la novela de la autopublicación a la edición tradicional dentro del grupo editorial más grande del mundo.

He vivido estos dos premios y estos dos pasos con mucha responsabilidad. Me siento tremendamente agradecida, pero también convencida de que me gustaría responder a este cariño de las editoriales y los lectores con trabajo. Le debo a todos ellos intentar dar lo mejor de mí misma.

Por el camino, ganaste dos premios literarios y llegaste a los 10 000 lectores. Es un currículum impresionante para alguien que venía casi de la nada, ¿cuál crees que fue la clave de ese éxito?

Siempre digo que escribir es una lucha, una lucha dura en todas sus etapas. Empezar a dar forma a la historia es complicado, conseguir que te publiquen es complejo, pero es que cuando consigues que tu novela esté en todas las estanterías y crees que lo tienes todo hecho…, tienes que vender. Y llegar a nuevos lectores es también a veces difícil.

Creo que la clave para salir airosa de cada una de estas etapas es trabajar y creer en uno mismo, ir por cada una de ellas sin complejos. Al escribir, nunca sabes el valor real de lo que tienes en tus manos, pero creo que si te has esforzado como nunca antes y lo has creado con ilusión, si has puesto al lector por encima de todo… Creo que hay que defenderlo, cuidar el trabajo realizado y, con ilusión, darlo a conocer. Disfrutar y hacer disfrutar al lector, creo que esa es la clave.

Y ahora, en Penguin, ¿qué tal le está yendo a tu libro?

Esta misma semana hemos iniciado una nueva reimpresión de la novela al agotarse en los distintos canales, así que muy feliz, ya que la novela está gustando mucho y atrayendo a nuevos lectores.

Estoy también muy contenta y agradecida con todo el trabajo que han realizado y están realizando Penguin Random House. También por la confianza que han depositado en mí.

¿Dirías que hay algo que eches de menos de cuando eras una autora menos conocida?

Me gusta que la novela se abra camino y llegue a nuevos lectores, por lo que realmente creo que es una suerte ir saliendo poco a  poco del anonimato. Además, disfruto mucho las firmas y el contacto directo con el lector (hablar de la novela con los lectores es algo que me encanta), así que realmente creo que casi todo son ventajas.

Si tuviera que decir una cosa es que el trabajo ahora se multiplica: hay que atender bien las redes sociales, los e-mails, asistir a firmas y presentaciones… En definitiva, es un poco más difícil centrarse solo en escribir.

Cuentas que sueles hacer firmas de libros por muchos puntos de la geografía nacional. ¿Qué es lo que más te gusta del trato personal con el lector?

Trabajo tanto que nunca he tenido demasiado tiempo para viajar. Desde que se reeditó El sufrimiento de las cigarras, mi vida ha cambiado radicalmente en ese sentido: he firmado en Sevilla, Córdoba, Madrid, Alicante… De aquí a Navidad, me esperan Valencia, Albacete, Murcia, Cartagena… Es una locura. Pero es una locura muy bonita: me permite tener una relación más cercana con los lectores y dar a conocer la novela.

Lo cierto es que disfruto mucho de todas estas experiencias.

¿Qué referentes literarios tienes, María Jesús?

Leer es algo muy importante en mi vida y leo de absolutamente todos los géneros (y lo cierto es que disfruto de cada uno de ellos).

En España tenemos la suerte de contar con autores que destacan a nivel mundial, podría empezar a decir nombres y no parar, pero voy a mencionar a dos autoras de las que aprendo cada vez que me sumerjo en sus historias: María Dueñas y Dolores Redondo.

Fuera de nuestras fronteras, leo todo lo que publican Kate Morton (me encantan sus novelas), Ken Follett y Joël Dicker.

Una de las cosas que más me gusta de leer es todo lo que aprendemos al sumergirnos en las páginas de un libro.

La verdad es que te pusiste el listón bastante alto, ¿es esto una motivación para el futuro? Háblanos un poco sobre tus próximos proyectos.

Sin duda es una motivación pero también, a veces, se siente cierta presión. Hace muchos años leí que cuando Penélope Cruz terminó el rodaje de su primera película (Jamón, Jamón), se hundió, ya que tenía la sensación de que iba a ser la primera y la última. Me he sentido en algunos momentos identificada con esas palabras, porque nunca sabes qué te espera por delante, si estás al principio o al final de algo.

Escribir es una profesión solitaria y cargada de incertidumbre. Pero una vez que se empieza, engancha. Es difícil frenar a la historia que crece dentro de ti. Así que intento transformar toda esa sensación en una oportunidad para superarme y seguir avanzando. Actualmente estoy terminando mi segunda novela, llevo casi cuatro años trabajando en ella y espero tenerla terminada a final de año. Hay muchos miedos, pero también mucha ilusión. Escribir es eso, una mezcla de sentimientos. Duro y bonito a la vez. ¿Qué puede ser mejor que tener la oportunidad de crear algo que puede hacer disfrutar a miles de personas?

Por Eva Fraile, de La Reina Lectora
@reinalectora

Biografía del autor