El pasado 25 de Octubre tuve la oportunidad de sentarme a charlar con Fernando Aleu autor de la novela “El intercambio”, una de las grandes apuestas de Roca Editorial y que desde hoy 8 de Noviembre podéis encontrar en librerías.
Fernando Aleu nació en Barcelona, donde obtuvo el título de doctor en Medicina en 1953.
Realizó sus estudios de posgrado en los hospitales de la Universidad de Iowa, el Albert Einstein College of Medicine de Nueva York y en la New York University School of Medicine, donde obtuvo el puesto de profesor asociado de Neurología.
Al cabo de nueve años, comenzó a reducir lentamente este trabajo para terminar dedicándose a una aventura comercial asociado a la multinacional Puig, con sede en Barcelona. Ha sido presidente de la Cámara de Comercio de España en Estados Unidos, presidente de la Fragance Foundation de Nueva York y miembro fundador del Olfactory Research Fund. Actualmente es el presidente del Queen Sofía Spanish Institute de Nueva York. Ha sido condecorado dos veces por el Gobierno español y ha merecido la Medalla de Honor de la Ciudad de París. El intercambio es su primera novela, basadas en hechos reales y novelados con una pasión que sorprende desde las primeras páginas.
“A mí me gustaría que tomaseis nota de que vale la pena vivir, que la vida te ofrece un nuevo día”
¿Por qué decides el sentarte y escribir esta novela?
Me jubilé, siempre he tenido una vida muy activa físicamente, esquiaba mucho, era nadador y jugaba al tenis… y un día sin darme cuenta de que mi cuerpo ya no era el de el esquiador de hace treinta años me “pegue una torta” esquiando en Colorado y me quedé no deprimido, a mí no me gusta la depresión, siempre me gusta ver el halo plateado rodeando la nube negra… y me dije tengo que reconsiderar mi vida, ahora tengo tiempo y los deportes que me han gustado ya no los puedo practicar y siempre he leído mucho. Siempre me han dicho que todos llevamos una novela dentro de cada uno, apareció una mujer y me dijo tu nieta me ha dicho que tiene una historia, cuéntame, esa mujer es una persona muy cosmopolita que ha vivido en New York, Paris y Mexico… Yo le conté que esa novela que tengo en mí me puede ayudar mucho a superar esa fase de inactividad que he tenido y mantener el cerebro ocupado.
Fernando, tu vida parece que está marcada por las coincidencias. Pero tu relación con el mundo de la moda también es un poco una coincidencia.
Te puedo contar como conocí a Carolina Herrera… hay una asociación comercial en NY The Fragance Foundation que aglutina a todos los fabricantes de perfumes en una especie de sindicato, y esa asociación ofrece un premio anual a la fragancia que ha tenido mayor éxito en las navidades precedentes. Y aquel año ganó el premio Linda Evans (actriz de Dallas) por un perfume que se llamaba “Forever”. Tenía que entregarle el premio, al volver de casa de cambiarme para el evento me encontré en un embotellamiento y llego a la ceremonia una hora tarde… la responsable del evento me pidió que me dirigiera a un grupo de personas que estaban en la sala y me excusase a Linda Evans, yo me acerqué a una mujer alta, rubia con un traje blanco… Entro la primera señora que veo rubia con un traje largo blanco le digo miss Evans y me dice “I´m not miss Evans…” y le pregunto “Who are you?” Y ella me contesta “And… who are you?” clásica respuesta a pregunta estúpida, me presento y me dice que es Carolina Herrera… coincidencias, yo creo que las coincidencias ocurren cada día para todos, otra cosa es saber identificar el potencial de esa coincidencia, y entonces si la agarras y no las sueltas es posible que salga algo de ahí.
“Me gustaría seguir escribiendo”
¿Cuándo te planteaste la novela el final lo tenías claro?
No, el final no lo tenía claro. La novela la planteé con mis recuerdos. En el 43 tenía 14 años, después de clase en Barcelona íbamos a entrenar al club de natación del puerto de Barcelona, y la noche del 22 de octubre de 1943 la guardia civil nos dijo que no se podía pasar. Nos dijeron que mañana iba ocurrir algo en el puerto y está cerrado. Mi amigo Pepe Gancedo me dijo mañana vamos a subir al castillo de Montjüic con prismáticos para ver qué pasa, vimos un enorme barco blanco que entraba en el puerto, y luego otro y otro… Y al muelle de España no pararon de llegar coches negros esvásticas, otros con el Union Jack, algo se estaba cociendo. Al día siguiente en todos los periódicos aquel hecho fue primera página y portada.
“Soy una persona muy liberal, acepto las críticas, y no solo acepto la crítica sino que la persigo”
¿Qué influencia tienen las mujeres en tu vida? Tus personajes femeninos son muy fuertes.
Mi madre era una mujer acomodada, era una santa. Yo invariablemente iba con mi madre cuando mis padres discutían. Me decía gracias por salir en mi defensa, se creó una complicidad, quizás injusta con mi padre. Yo tenía una hermana mayor, quizás me convertí en un Don Quijote, defendiendo a mi hermana de lo que yo creía que era injusto.
Cuando fue a estados unidos con 22 años, caí siendo un señor moreno, español… me casé con una estudiante de farmacia, ambos no estábamos preparados para casarnos y aprendíamos a vivir en común y no empezamos a funcionar bien como matrimonio hasta que yo me di cuenta de que era una mujer extraordinaria. Ella tuvo mucha influencia en mi vida. Nos separamos después de treinta años.
Con mi nieta tengo mucha complicidad. Es una chica emprendedora, lista y con gran sentido del humor. Hay personas con las que te sientes cómplice con ellas, puedes hablar del tema que quieras, si hay complicidad aunque los puntos de vista sean diametralmente opuestos, el intercambio de conversación es correcto, es constructivo y puede ser agradable, a mí me encanta discutir sin enfadarme.
De una magnífica charla que es casi imposible de reproducir, primero por su extensión y porque hubo momentos en los que ambos nos hicimos confesiones personales sobre nuestras vidas nos quedamos a modo de resumen con las siguientes reflexiones, consejos y aspiraciones…
Fernando Aleu nos regalo una maravillosa lección de vida, descubrimos al gran personaje que se esconde detrás de esta fantástica novela que no es otro que el propio autor, un hombre con una vida apasionante y apasionada que podréis descubrir rascando un poquito en su biografía.
Agradecer a la Editorial Roca y a Sílvia Fernández el haber podido disfrutar de una mañana que queda en mi memoria para siempre.
Muy pronto la reseña en el Blog.
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