Leslie G, autora de La maldición de Tonr, nos habla de los elementos básicos de una novela de fantasía.

Por Eva Fraile.

Leslie G, autora de La maldición de Tonr, nos habla de los elementos básicos de una novela de fantasía.Leslie G. es una escritora de fantasía que acaba de publicar su tercera novela con la editorial Caligrama: La maldición de Tonr. Esta obra ha recibido el Sello Talento y compite en los premios Caligrama 2021, en los cuales, la autora ya quedó finalista en la categoría best seller con su primera novela.

Leslie se ha especializado en el género fantástico, un género con fieles seguidores que tienen sus propias características. Las analizamos junto a ella:

Primeros pasos para escribir una novela de fantasía.

Leslie:

Contrario a lo que muchas personas piensan, mis novelas empiezan por los personajes y es alrededor de ellos que voy construyendo el mundo. Entonces, yo diría que el primer paso es descubrir a tu protagonista: ¿Quién es? ¿Qué ama? ¿A qué le teme? ¿Cuáles son sus gustos, sus valores, sus defectos?

Luego, tenemos que colocarlo en tiempo y espacio. Un buen libro de fantasía necesita de una buena ambientación que transporte al lector para dentro de la historia.

Por último, inserir pequeños misterios que se irán descubriendo a lo largo de la historia hasta llegar al final.

Consejos para realizar un buen despliegue imaginativo.

Leslie:

Muchas veces, lo difícil es callar las ideas que se amontonan y quieren ir todas para el papel. Yo me inspiro en mis sueños y en ese lugar a donde vamos cuando logramos quedarnos solos de verdad. Me gusta observar la naturaleza y jugar a imaginarme qué sucedería si cambiáramos un poco las leyes.

Los días de bloqueo creativo los dedico a revisar, en esos días me convierto en jueza y reordeno todo lo escrito para tratar de dejarlo perfecto.

No creo que se terminen las ideas. La imaginación es un pozo infinito, a veces se esconde un poco pero luego regresa, no hay que forzarla. Aunque una copita de vino suele destrabar bastantes puertas…

 

Elementos fundamentales en las novelas de fantasía.

Leslie:

Descubrí el viaje del héroe con las reseñas que han recibido mis libros, pero debo reconocer que se trata de una característica bastante común en las historias de fantasía y no una particularidad de mi libro, así pues, este puede ser el primer elemento a nombrar.

Se repite también la estructura de magia: en algunos libros es totalmente libre; en otros depende de hechizos determinados que los protagonistas suelen aprender; y, en otros, como Leyendas del Bosque Azul, está definida por las características naturales de cada raza.

Estructura con saltos temporales. ¿Cómo se construye?

Leslie:

Este es un modelo arriesgado porque si no se hace bien puede acabar confundiendo bastante al lector. He leído libros con historias muy bonitas pero que me han obligado a regresar una y otra vez a consultar los nombres de capítulos porque me pierdo en el tiempo.

Existen dos posibilidades: aquellas donde el autor deja claro las líneas temporales, ya sea colocando fechas o referencias, como en La Maldición de Tonr; y aquellas en los que el tiempo se convierte en un misterio más y no sabemos hasta avanzar en la novela a qué tiempo pertenecía lo que leímos antes.

Lo más importante, para mí, es no convertir la narración en una secuencia constante de saltos que distraigan al lector. La lectura debe ser fluida y los misterios, sean temporales o de otra índole, deben ser insertados con sutileza.

Reglas básicas para crear la mitología de una novela.

Leslie:

Debe ser creíble. Está bien jugar con la naturaleza de las cosas, pero los seres y sus magias deben encajar con las reglas de nuestro mundo. Es bueno tener un esquema de magia definido y por lo menos a mí me gusta utilizar características físicas que los diferencien de los humanos, aunque no creo esto último sea imprescindible.

 

Cómo construir las leyes de un mundo fantástico.

Leslie:

Como te comentaba anteriormente, debe ser creíble. Construimos las leyes con nuestra imaginación, pero cada nueva regla debe ser consecuente con las otras. Personalmente, no soy de las que piensan que porque una historia sea de fantasía o de ciencia ficción esté permitido todo. Es importante que el lector comprenda cómo funciona nuestro mundo y ahí está precisamente el reto: que, una vez interiorizadas las leyes, reciba lo que sucede como algo natural, perfectamente explicable.

La elección de nombres en una novela de fantasía.

Leslie:

Es la parte más difícil para mí. Los nombres tienen que representar al personaje, tienes que poder decirlos con los ojos cerrados e imaginarte a su dueño tal y como lo describe el libro. Confieso que le dedico un buen tiempo a este tema y no sé si lo estoy haciendo bien. En La Maldición de Tonr, aparece un hechizo llamado Ignigon que salió de un sueño, ese día me desperté repitiendo la palabra y decidí colarla en el libro.

Ya he terminado mi novela de fantasía. ¿Y ahora qué?

Leslie:

Todavía lo estoy descubriendo. Me decidí por Caligrama porque a pesar de ser un sello de autopublicación pertenece a la Penguin Random House y sus ediciones son de una calidad excelente.

He descubierto que los lectores de fantasía son pocos, pero leales. Hay una comunidad de instagramers muy bonita donde todos se ayudan y colaboran porque lo que realmente importa es vivir en ese mundo mágico.

Yo sé que compito con géneros más populares como el thriller o la novela romántica, pero amo la fantasía y no abandonaría a mis lectores por nada.

Por Eva Fraile.
@reinalectora

La maldición de Tonr: Leyendas del Bosque Azul
de Leslie G.

«Créeme cuando te digo que lo que más deseo es volver a dormir hasta que tu mundo se destruya a sí mismo. Sin embargo, cuando cierro los ojos solo te veo a ti».
La Maldición de Tonr te llevará a través del mundo de los dos soles en un viaje mágico donde conocerás paisajes sorprendentes y seres de diferentes razas que conviven con la magia por naturaleza.

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Eva Fraile
Agente literario, agente de derechos internacionales, asesora editorial, experta en posicionamiento de escritores y redactora en distintos medios de comunicación. Prensa en Academia del Cine. Editora de la web La Reina Lectora. Escritora de Proyecto Crysser. Olvido.